Retomo la publicación en el blog de los artículos ¿quincenales? En El Confidencial, que había dejado de hacer desde este verano por falta de tiempo (es lo que tienen los cambios de trabajo que incluyen cambio radical de sector y de actividad). Además, hace unos meses que me he pasado a los miércoles en vez de los martes. En todo caso, en esta ocasión y a raíz del anuncio de la Fed de la semana pasada (por el 19/sep/2013), he dedicado el post a comentar la decisión de continuar con el programa de estímulo monetario, también llamado quanti tarife easing. Entre nosotros, impresión salvaje de dinero que a algunos keynesianos recalcintrantes les parece maravilloso. Me pregunto por qué no se mudan a Zimbawe, paraíso de la tinta fresca y el papel moneda.
Como siempre, os dejo aquí el arranque del post y, de bonus, os añado el vídeo del programa de Paco Costas que utilizo como introducción.
Si fueron ustedes a la EGB, quizás recuerden aquel programa de televisión presentado por Paco Costas llamado La segunda oportunidad. Orientado a instruir a los telespectadores en cuestiones de seguridad vial, este espacio televisivo emitido a finales de los años 70 y principios de los 80 contaba con una inolvidable cabecera –que los más jóvenes y los nostálgicos pueden recordar gracias a YouTube– en la que un Jaguar se estrella contra una roca que yace en mitad de la carretera, mientras la voz en off del presentador nos recuerda que “el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra”. Pues bien, cuando las políticas de impresión indiscriminada de dinero de la Fed, ratificadas el pasado jueves por el Federal Open Market Committee (FOMC), nos conducen directos al pinchazo de una nueva burbuja, aquella frase cobra sentido.
Para seguir leyendo (y compartiendo y comentando), seguí este enlace.
Y aquí el vídeo de La segunda oportunidad, ¡no dejéis de verlo!