Tras un descanso estival de publicación -que no de trabajo, que ha sido todo lo contrario- durante el mes de julio, retomo los artículos en El Confidencial abordando un tema que me preocupa bastante cómo va a terminar. Me refiero al inédito experimento monetario que están haciendo los bancos centrales para combatir la tendencia a la deflación propia de todo proceso de ajuste tras una burbuja. Se están inyectando cantidades enormes de nuevo dinero al sistema, generando una gran distorsión y creando una situación de inestabilidad que puede decantarse hacia una brusca deflación o hacia una acusada inflación, no sabemos qué. Para ilustrar esta pugna, he arrancado así el post:

Probablemente, algunos de sus hijos o nietos han practicado este verano el clásico juego de la soga -actividad típica de los campamentos estivales- en la que dos equipos ponen a prueba su fuerza tirando cada uno de un extremo de una cuerda. Se trata de un juego en el que no es infrecuente ver a ambos equipos en el suelo cuando aquel que se ve derrotado suelta bruscamente la soga, o cuando esta se rompe. Pues bien, una competición similar es la que estamos asistiendo en la actualidad entre las fuerzas de la inflación y las de la deflación, de resultado incierto aunque con bastante menos diversión que el tradicional pasatiempo.

Leer más: El peligroso juego de la indeflación – Blogs de Monetae Mutatione

Bonus multimedia: Por si no lo sabíais, el conocido juego de la soga o sogatira, como se llama en algunas zonas de España, era considerado un deporte olímpico entre 1900 y 1920 y, aunque ya no forma parte de las disciplinas de las Olimpiadas de Verano, sí que existe, como no podía ser de otra forma, un mundial en toda regla. Aquí os dejo la reñida final, casi de infarto, del World Championship de 2012…